Me gusta sentarme delante de una cuartilla con una pluma y dejarla fluir, que lo que se me pasa por la cabeza se plasme en el papel.
No es fácil localizar cuartillas, más de las veces tengo que partir folios, pero parece que vuelven a las papelerias.
Ire pasando a este mundo digital las cuartillas que vaya garabateando